Existen acontecimientos que se convierten en vestigios abiertos en la memoria de un pueblo. Sucesos que entretejidos en el proceso constante de la historia dejan huellas profundas con sus personajes, objetos y consignas. Éstas se develan cada cierto tiempo cuando se tropiezan con la intención de ser reproducidas, superadas, borradas o sustituidas por nuevas huellas provocando así complejas resignificaciones que se manifiestan en nuevas formas de pensar, sentir y reflexionar nuestro contexto actual. La muestra Ensayos de emancipación entrelaza tres obras que interpelan a reflexionar sobre cómo algunas de estas nuevas huellas surgidas a partir de ruinas, mitos o legados culturales se sitúan hoy en un contexto de crisis institucional y cambio cultural. La experiencia colectiva inducida por el contexto sociopolítico del año 2011 en Chile, provocado principalmente por el movimiento estudiantil, provocó profundas reflexiones en las personas que trabajaron en los diversos frentes del movimiento social en torno a la historia oficial, la estructura política chilena, lo público y lo privado, la protesta clásica, las raíces del sistema actual, el arte y su institucionalidad. El legado histórico de los cacerolazos como expresión de descontento popular que se expresó el 2011 a manos del movimiento estudiantil, el traspaso generacional y político de la consigna “El pueblo unido jamás será vencido” repetido en cada marcha desde la unidad popular hasta nuestros días y la herencia institucional del mito Portaliano representado en su monumento y el ex edificio Diego Portales se conjugan en propuestas visuales que problematizan estos tópicos para presentar nuevas lecturas tan necesarias a la hora de enfrentar el olvido, la indiferencia o el borroneo institucional que provoca la historia oficial.
Ni adorno ni sumisión, muestra cómo utensilios de cocina - ollas, sartenes, pailas, etc- al ser usados como instrumentos sonoros para expresar un profundo sentimiento de indignación, adquieren una nueva identidad: la representación plástica del malestar social. La instalación sonora Consigna es un intento por entender por qué una frase repetida por sucesivas generaciones y en diversos contextos aun no se ha podido concretar. De qué modo los conceptos que carga la emblemática consigna “el pueblo unido jamás será vencido” han ido mutando en el tiempo; que significaba esta frase en sus primeros años de “existencia” y que significa gritarla hoy en las recientes manifestaciones sociales. El legado de portales nace por la crítica a la profunda crisis institucional que vivimos hoy en Chile y el estudio de su origen. Es ahí cuando se toma el mito Portaleano (en referencia a Diego Portales organizador de la república) para conectar una serie de acontecimientos alrededor de su nombre, como el balazo que lleva su monumento frente al palacio de La Moneda en el pómulo izquierdo desde el golpe de estado de 1973 y el incendio que sufrió el edificio Diego Portales (hoy centro cultural GAM y ex centro de operaciones de la dictadura) el año 2006, edificio construido por el gobierno de Salvador Allende, sede de la Tercera Conferencia Mundial de Comercio y Desarrollo (UNCTAD).
Texto Paula Urizar y Cristian Inostroza
Obra "Ni adorno, ni sumisión" Paula Urizar y Cristian Inostroza
Obra "consigna" Paula Urizar
- Exposición Bipersonal con Paula Urizar
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